miércoles, 24 de agosto de 2011

VISILLERA ON FIRE


Hace tiempo que descubrí ese lugar maligno lleno de feromonas revueltas, sueños húmedos pisitófilos y lamidas de conejo. Se trata ni mas ni menos que el foro de facilísimo, que no es mas que un foro donde señoritas en edad casadera a punto de contraer matrimonio, se cuentan entre ellas las ultimas novedades del Ikea (porque ellas también tienen derecho a su fieshhta), se aconsejan sobre que visillos les vendrá bien al color pastel que han decidido para las paredes, y por ultimo (porque es lo menos importante) como pagar la hipoteca.


Lo que voy a contar es un caso totalmente verídico. Banca Pueyo, señorita a punto de recibir un piso de VPO que necesita una hipoteca ya. En situación de paro desde hace mas de un año, sin un puto duro ahorrado. Cualquier hijo de vecino con dos dedos de frente se puede imaginar que le den con la puerta en las narices o que incluso se lleve una reprimenda por inconsciente. Pues no, olvidamos que esto es Ejpain, hipoteca concedida.


Y la muchachita en cuestión lo cuenta como "un final feliz" como si tuviera la ultima letra de la hipoteca pagada. Al fin y al cabo según ella son 400 euros de nada, eso lo paga cualquiera, y mas estando en paro desde hace un año. Sobre los tipos de interés del BCE y sobre Trichet no ha oído hablar en su puta vida, pero eso que es, ella ya tiene un lugar donde colocar sus visillos.


Hijas de puta e hijos de puta (igualdad ante todo) como estos son los que nos han llevado a donde estamos. Supongo que  de aquí a un año veremos a esta cerda en cuestión manifestarse por la dación de pago, o contra los banqueros (que no seré yo quien quite la parte de culpa que tiene el hijo de la gran puta del banquero que le ha aceptado la hipoteca). Ya me la veo con el "peace & love" en hermandad y armonía rodeada de perroflautas pidiendo un mundo mejor, o lo que es mejor, en actitud rebelde con cartelón de CCOO diciendo "camaradas a las barricadas".



Y luego me dicen que no tengo corazón por no sentir compasión por esta escoria de la que tenemos millones en este país. Que cada perro se lama su cipote. Lo que no sabe esta pobre mongola, es que ella si se lo va a lamer, pero al banquero se lo va lamer el papá estado, por eso concede la hipoteca tan alegremente. A fin de cuentas y como dijo aquella ministra de "la pzoe": "el dinero publico no es de nadie".